Cuestionario vpf |Pitingo

Un artista…

Me gustan todo tipo de cantaores, con voz ronca, con voz laína pero, por generación, me quedaría con Camarón y eso que no soy un artista que cante por él porque cuando lo escucho se me quitan las ganas de cantar y de dedicarme a ésto.

¿Y uno vivo? …

Por cariño, porque lo adoro, por su voz, por lo que significa para el Flamenco y porque es de lo poquito que nos queda me quedo con Rancapino. Representa la época dorada del Flamenco. Es una leyenda viva.

Un nuevo flamenco…

Para mí Flamenco solo hay uno. ¿Que se cante ahora de otra manera? Sí, es normal, por el momento en el que estamos y por las vivencias pero creo que no hay nuevo Flamenco. Otra cosa es los experimentos que hagamos cada uno pero para mí no hay nuevo Flamenco. Es imposible cantar igual que antes porque la forma de relacionarnos es distinta. No hay esa hermandad que había antes. Cada uno va más a lo suyo. No hay tampoco esa necesidad de tirarte a la calle a buscarte la vida… Antes tenías que aprender a marchas forzadas escuchando a los demás, ahora te pones Youtube para estudiar. Lo que sí hay son muchos nuevos flamencos y cantando muy bien, Israel Fernández, Rancapino Chico, Pedro “El Granaíno”, La Fabi… Incluso gente que no hace flamenco ortodoxo me gusta. Creo que hay que arriesgar también, sabiendo la base y sabiendo diferenciar.

Un palo…

La Soleá sin duda.

Una letrilla…

“Aunque toquen a rebato
las campanas del olvido
no pueden apagar este fuego
que esta gitana ha encendido”. De Juan Mojama

Una actuación para el recuerdo…

Pues la primera vez que vi un teatro lleno, en el Calderón. Estaban entre el público Enrique Morente y Carmen Linares, pero cuando vi a Enrique que se puso de pie y mientras cantaba el coro de Gospel, le vi bailar. Esa imagen se me quedó grabada. Había mil doscientas personas y yo sólo le veía a él. Sería por 2009 ó 2010. Fue todo contra marea, la discográfica quería que siguiese con el flamenco tradicional y fue él uno de los que me animó a hacer lo que quería. Luego entró en el camerino y me dijo que había visto a un cantaor, a un artista…. No se me olvidará nunca esa imagen.

Tu próximo espectáculo…

Estamos terminando ya esta etapa de mi disco “Mestizo y Fronterizo” que es muy personal porque me define. Soy mestizo, mi madre es gitana y mi padre no lo es y además nací en la frontera con Portugal. Quise hacer un disco mejorando la fórmula de esta música afro – americana con pinceladas de flamenco, acercamiento a sus ritmos, aunque por ejemplo hay una Toná que se llama “Fuera Cadenas” y es un canto a la libertad. También he dado mi parte más de autor y de productor junto a José Manuel Gamboa. Ha sido una gira que me ha dado muchas satisfacciones. He podido cantar con Sam Moore, que es una leyenda viva del Soul mundialmente conocido. Él con ochenta y cuatro años y yo con cuarenta, con Roy Woters de Pink Floyd. Fue muy curioso porque vino a Madrid y quiso que fuera a verle al Palacio de los Deportes pero yo actuaba en Gran Vía, así que luego quedamos en el hotel y estuvimos hasta las siete de la mañana cantando. Adora el Flamenco y el vino. Está deseando ir a Jerez.

Hemos hecho muchos conciertos por el mundo y ya cerramos en Madrid el 28, 29 y 30 de Noviembre en el teatro Nuevo Apolo.

Ya estoy hablando con Gamboa porque tengo cosas nuevas en la cabeza. Bueno según acabo un disco estoy pensando en el otro pero no puedo contarte nada aún.

Define Flamenco…

Para mí el FLAMENCO es una palabra en mayúsculas que define una forma de vivir y de ser. Es historia. Yo siempre les digo a los chavales que si quieren saber cómo era España hace cincuenta años que escuchen flamenco porque las letras te lo dicen. Es la música más importante del mundo, para mí y para los artistas más grandes del mundo también. Lo he vivido como Beyonce, Aretha, Roy Woters, todos, mueren con el Flamenco. A ver si aprendemos en España eso también. El baile y la guitarra es más digerible en el extranjero porque como no entienden la letra… Recuerdo un festival en Atlanta que era un público negro, de música blues, yo era el único Flamenco y de repente hice una Soleá y me fui al “What a Wonderful World” de Louise Armstrong y empezaron a volverse locos, pero a ritmo de Soleá. Y son gente que no dicen ole a cualquier cosa… Les parece una pasada el flamenco. Lo que es una pena es que la gente aquí en España que lo puede entender, no lo intente. Con la de cantaores buenos que hay y luego no tienen donde exponer sus trabajos. No me extraña que se vayan hacia otros lados. Yo porque soy mestizo y vengo de ahí, a los nueve años ya hacía cantes por Soleá pero igual hacía letras de Aretha por Bulerías. Con catorce años hice unas pruebas de acceso para un coro Gospel y entré. Pero la música más importante que hay en el mundo es el Flamenco. Como el Flamenco no hay nada.